El chozo es el tipo de arquitectura vernácula más representativa de Extremadura, por estar diseminado por todo su espacio.
Los chozos son “viviendas” muy básicas diseminadas por el espacio casareño, de forma circular, construidas con piedra vista y sin argamasa, que se utilizaban de manera temporal por los pastores de la trashumancia. Algunos se han encalado con el paso de los años. El chozo en nuestro municipio es denominado como bujío o gurugú, si es de piedra. Cuando se construía con bálago se le denominaba chozo.
El majano o gurugú del paraje La Retoña, ha servido de refugio para pastores y descansadero de ganados trashumantes, que hacían la ruta de la Cañada Real Soriana Occidental. Ubicado a la entrada del cordel, donde la cañada entrelaza con la calzada romana, en el camino de las Barcas.