El Día Internacional de la Mujer conmemora la lucha de las mujeres por su participación en pie de igualdad con el hombre, en la sociedad y en su desarrollo íntegro como persona.
En España hemos asistido a avances, como ha sido la aprobación de La Ley de Igualdad efectiva entre mujeres y hombres y la ley Integral contra la violencia de Género, que han hecho de España un país avanzado legislando en igualdad, aunque sin embargo la distancia entre el articulado legal y la realidad del día a día es inmensa.
Las estadísticas a nivel mundial nos muestran que aún no existe ningún país en el mundo donde las mujeres y los hombres tengan total igualdad de oportunidades, igualdad de remuneración o igualdad en acceso a puestos de responsabilidad; que todavía las mujeres ganan menos que los hombres por el mismo trabajo, que acceden en mayor proporción a los trabajos peor remunerados, informales o precarios, así como empleos a tiempo parcial.
A nivel mundial las mujeres, constituyen únicamente el 21,9% de los parlamentarios; más de un tercio de las mujeres del mundo experimentará violencia de género por parte de su pareja; en promedio, poseen únicamente el 15% de títulos de propiedad. Además las complicaciones en el embarazo y el parto son una de las principales causas de mortalidad entre las niñas de 15 a 19 años en los países en desarrollo.
Por otra parte, continúa recayendo sobre las mujeres el peso del cuidado y la atención a la familia. El trabajo doméstico sigue siendo la principal fuente de ingresos de las mujeres y de las niñas, y para muchas mujeres es el principal trabajo remunerado a tiempo completo.
Con la crisis económica las condiciones sociales y laborales han empeorado profundamente. Los últimos datos publicados por la EPA 2014 reflejan lo siguiente:
• Crece la brecha del desempleo entre mujeres y hombres. Y también crece la brecha salarial, (las mujeres ganan 5.745 € menos que los hombres, al año).
• Desciende el porcentaje de ocupación femenina mientras crece la masculina.
• Se incrementa la tasa de temporalidad femenina.
• Crece el empleo a tiempo parcial femenino mientras que se está reduciendo el masculino.
Por todo ello, las mujeres casareñas queremos manifestar en este 8 de marzo de 2015 nuestro compromiso con la igualdad que ya formalizamos con en el I Plan de Igualdad aprobado el 5 de marzo, y reivindicamos:
1º- Que vuelva a recuperarse el presupuesto destinado a los programas de igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, y a actuaciones para la prevención integral de la violencia de género en los Presupuestos de las Administraciones Públicas.
2º- Exigimos voluntad política para consensuar con los interlocutores sociales la elaboración y puesta en marcha del necesario Plan Especial para la Igualdad de mujeres y hombres en el ámbito laboral y contra la discriminación salarial.
3º- Reivindicamos el cumplimiento del compromiso establecido en la Ley Orgánica para la Igualdad Efectiva de mujeres y hombres, de la ampliación del permiso de paternidad a cuatro semanas, que es una medida fundamental para avanzar eficazmente en la corresponsabilidad de la conciliación de la vida laboral y familiar ya que esta parada contribuye a perpetuar los roles sexistas y la discriminación de las mujeres en el mercado de trabajo y en la sociedad.
4º- Demandamos una mayor inversión en las políticas de igualdad porque permiten a las mujeres, mayores y mejores oportunidades de empleo y exigimos la derogación de la reforma laboral aprobada por la Ley 3/2012, de 6 de julio y de la reforma educativa aprobada por la Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, porque suponen una regresión en los derechos de las mujeres.
5º-Demandamos que se recupere la financiación de la Ley de la Dependencia así como la creación de infraestructuras públicas para la atención a personas dependientes y menores de 0 a 3 años, tan necesarias para avanzar en el logro de la conciliación y corresponsabilidad entre mujeres y hombres.
6º. Defendemos que se promueva por todos los poderes públicos la presencia y representación equilibrada de las mujeres en todos los ámbitos de toma de decisiones así como en los procesos de negociación colectiva, (para conseguir una integración igualitaria en el ámbito laboral y social).
7º Reivindicamos el respeto a la libertad de decisión sobre nuestros cuerpos, sin ningún tipo de tutelas, ni restricciones ideológicas, religiosas o morales.
Por todo ello, en este 8 de marzo nuevamente reclamamos el derecho de la mujer a la igualdad en todos los ámbitos y al respeto de todos sus derechos.
Casar de Cáceres, 8 de marzo de 2015.